26 abril 2013

Porqué las mejores cosas son gratis


Vivimos en un constante debate interno entre lo que queremos y lo que necesitamos, ambos enlazados en intentar complacer el deseo de la vida que no es el cumplimiento de metas personales ni lograr la armonía familiar, no, es mucho más egoísta que eso: la felicidad propia. Entonces pasamos toda la vida buscando los instrumentos para llegar a ella, un buen trabajo, un buen marido, una buena casa, carro, ropa, celular y apenas escuchamos que ''el dinero no lleva a la felicidad'' nos enchispamos o no en una defensa de nuestra opinión sobre el asunto. Muchos dicen que esta frase es tonta, infantil y poco realista. Aquí mi opinión.  
Soy una de las soñadoras, tontas, infantiles y poco realistas, si así lo crees, que tiene la certeza de que ''el dinero no lleva a la felicidad'', si bien se que facilita bastante las cosas, te da un tranquilidad y te permite tener cosas que te complacen pero ¿complacer es ser feliz?

Puedes comprar regalos pero no puedes comprar cariño, puedes comprar ropa y maquillaje pero no amor por ti misma, puedes comprar el celular más moderno pero no el sentimiento de aceptación social. La felicidad es lo más propio y más interno que hay, nadie te puede dar felicidad ni te la dará porque es un sentimiento que nace en ti, en el medio de los pulmones, como una luz amarilla y tibia que te calienta el alma cuando todo en tu vida encuentra su equilibrio natural, cuando tú lo equilibras. 

La felicidad no la buscas, la encuentras. La felicidad la aceptas, a la felicidad aprendes a tenerla.